iPod "Shuffffffffffle"
No lo comprendo. La comunidad internauta, y las webs especializadas en tecnología en general, suelen ser bastante objetivas cuando se trata de evaluar las novedades que las compañías sacan al mercado. Parece que Apple va repartiendo limosnas por ahí, por que si no no se explica el gran "wow!" que está recorriendo la red desde la presentación en sociedad del reproductor iPod Shuffle.
Visto de cerca el aparatito no es feo, que ya es un punto, aunque tampoco es un derroche de diseño y parece bastante anatómicamente cómodo de usar, que también es otro punto a su favor.
Los precios de salida del juguete, unos 99$ para la versión 512 por ejemplo, son los más competitivos del mercado dentro de la gama, siempre que hablemos de reproductores de marca reconocida. Sin embargo la gran ventaja de la diferencia de precio o de su pequeñísimo tamaño se diluye cuando uno se para a leerse las características técnicas del aparato.
Puedo entender, aunque no me haga ni pizca de gracia, que no reproduzca el formato propietario de Windows, WMA. También puedo entender que atendiendo al pequeñísimo tamaño que se ha conseguido, el tema de las pilas fuera complicado, lo que llevase a que tuviesen que usar una batería propia recargable en lugar de las clásicas pilas AAA. Para mi gusto este tipo de baterías, las propias de cada dispositivo como las de los móviles, son un engorro, pero bueno, es una cuestión de manías y para gustos los colores. Lo que no es tan comprensible es que la autonomía del cacharrejo de marras, habiendo sido diseñado por los creadores del iPod, dure solo 12 exiguas horas. Más lamentable todavía si nos paramos a pensar que estas baterías habrán sido pensadas ad hoc para el modelo "Shuffle". No hace falta rascar mucho para encontrar reproductores de la misma franja de precios que le dan mil vueltas al peque de la familía "pod", algunos modelos ya ofrecen hasta 50 horas de autonomía sin despeinarse demasiado con el tema del precio.
Otro punto sangrante, para mí que soy un loco de la radio el más grave, es que no incorpora sintonizadora fm. Ni en cascos ni en el propio reproductor, nanai, si quieres radio te la compras chato. Un fallo garrafal teniendo en cuenta como está la competencia. Solo por este punto saldría de mi lista de posibles candidatos a compra.
Un último problema que le veo, más leve o más grave según se mire, es la ausencia de una pantallita lcd donde poder ver lo que se está reproduciendo o comprobar el estado de la batería o el porcentaje de memoria que le queda libre al reproductor, una triste linea siquiera donde ver por donde andas dentro del sistema de directorios o el tiempo que le queda a la canción, qué sé yo, esas cosas que la gente mira en los lcd.
Para ¿compensar? esto han añadido una función "DJ". Algo así como hacer una transición de una canción a otra directamente desde el reproductor con solo mover un dedo. La idea es relativamente original ya que es algo común en muchos programas de reproducción pero todavía no se había visto esto en un reproductor portatil. Sin embargo no deja de ser un detalle anecdótico que se empeñan en presentar como una de sus virtudes principales tal vez precisamente por que de virtudes no anda sobrado el invento.
En resumen, creo que es un gran "blufff" de Apple. Han hecho el ridículo sacando un reproductor que quiere subirse al carro de los iPod pero sin ninguna de las ventajas de estos y que solo podrá competir en su sector de mercado por ser hijo de quien es y por tener un precio ajustadito, sin ser para nada un regalo, desde luego.
Algo más de info en Xataka
Visto de cerca el aparatito no es feo, que ya es un punto, aunque tampoco es un derroche de diseño y parece bastante anatómicamente cómodo de usar, que también es otro punto a su favor.
Los precios de salida del juguete, unos 99$ para la versión 512 por ejemplo, son los más competitivos del mercado dentro de la gama, siempre que hablemos de reproductores de marca reconocida. Sin embargo la gran ventaja de la diferencia de precio o de su pequeñísimo tamaño se diluye cuando uno se para a leerse las características técnicas del aparato.
Puedo entender, aunque no me haga ni pizca de gracia, que no reproduzca el formato propietario de Windows, WMA. También puedo entender que atendiendo al pequeñísimo tamaño que se ha conseguido, el tema de las pilas fuera complicado, lo que llevase a que tuviesen que usar una batería propia recargable en lugar de las clásicas pilas AAA. Para mi gusto este tipo de baterías, las propias de cada dispositivo como las de los móviles, son un engorro, pero bueno, es una cuestión de manías y para gustos los colores. Lo que no es tan comprensible es que la autonomía del cacharrejo de marras, habiendo sido diseñado por los creadores del iPod, dure solo 12 exiguas horas. Más lamentable todavía si nos paramos a pensar que estas baterías habrán sido pensadas ad hoc para el modelo "Shuffle". No hace falta rascar mucho para encontrar reproductores de la misma franja de precios que le dan mil vueltas al peque de la familía "pod", algunos modelos ya ofrecen hasta 50 horas de autonomía sin despeinarse demasiado con el tema del precio.
Otro punto sangrante, para mí que soy un loco de la radio el más grave, es que no incorpora sintonizadora fm. Ni en cascos ni en el propio reproductor, nanai, si quieres radio te la compras chato. Un fallo garrafal teniendo en cuenta como está la competencia. Solo por este punto saldría de mi lista de posibles candidatos a compra.
Un último problema que le veo, más leve o más grave según se mire, es la ausencia de una pantallita lcd donde poder ver lo que se está reproduciendo o comprobar el estado de la batería o el porcentaje de memoria que le queda libre al reproductor, una triste linea siquiera donde ver por donde andas dentro del sistema de directorios o el tiempo que le queda a la canción, qué sé yo, esas cosas que la gente mira en los lcd.
Para ¿compensar? esto han añadido una función "DJ". Algo así como hacer una transición de una canción a otra directamente desde el reproductor con solo mover un dedo. La idea es relativamente original ya que es algo común en muchos programas de reproducción pero todavía no se había visto esto en un reproductor portatil. Sin embargo no deja de ser un detalle anecdótico que se empeñan en presentar como una de sus virtudes principales tal vez precisamente por que de virtudes no anda sobrado el invento.
En resumen, creo que es un gran "blufff" de Apple. Han hecho el ridículo sacando un reproductor que quiere subirse al carro de los iPod pero sin ninguna de las ventajas de estos y que solo podrá competir en su sector de mercado por ser hijo de quien es y por tener un precio ajustadito, sin ser para nada un regalo, desde luego.
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