Mar Adentro

Mar adentro,
mar adentro.

Y en la ingravidez del fondo
donde se cumplen los sueños
se juntan dos voluntades
para cumplir un deseo.

Un beso enciende la vida
con un relámpago y un trueno
y en una metamorfosis
mi cuerpo no es ya mi cuerpo,
es como penetrar al centro del universo.

El abrazo más pueril
y el más puro de los besos
hasta vernos reducidos
en un único deseo.

Tu mirada y mi mirada
como un eco repitiendo, sin palabras
'más adentro', 'más adentro'
hasta el más allá del todo
por la sangre y por los huesos.

Pero me despierto siempre
y siempre quiero estar muerto,
para seguir con mi boca
enredada en tus cabellos.


Sabía que siendo de Amenabar la película no me decepcionaría. Solo puedo decir que me equivocaba. No solo no me ha decepcionado sino que ha entrado dentro de mi "lista personal de mejores películas que he visto". En mi opinión Amenabar ha realizado su mejor película hasta la fecha. Este comentario se quedará corto a la calidad del film pero intentaré hacerle justicia.

Lo primero que me llamó la atención de la película es la música que la apoya y dota a muchas escenas de mucha más carga emocional. La música es un actor más dentro de esta preciosa historia de la vida. En algunas escenas refleja el espiritu de los paisajes gallegos y en otras parece salir del interior de los protagonistas como si ellos mismos la estuviesen creando cuando expresan sus sentimientos. A la vez lleva al espectador a imbuirse en lo que está viendo. No se si expreso bien lo que quiero decir, viendola, por supuesto, entendereis al momento a lo que me refiero.

Los personajes. Hacia mucho tiempo que en una pelicula no me gustaban tanto las interpretaciones de los secundarios. Me pareció genial la interpretación de Celso Bugallo (Jose, el hermano), realmente me transmitió la desesperación del hermano que ha pasado toda su vida condenado a cuidar de un tetraplégico, a sacrificar la felicidad propia y la de su familia por cumplir con su deber y que, al final, ve como aquel al que tanto a cuidado renuncia a la vida.
Tampoco se puede olvidar la dulce interpretación de Lola Dueñas (Rosa) que, a mi por lo menos, me conmovió por su forma de querer, tan limpia y tan sencilla.
Para acabar destacaré dos puntos. El trabajo de Javier Bardem encarnando a Ramón Sampedro me ha parecido inmejorable. Podría dar lecciones a muchos papanatas de Hollywood, y de más cerca, que se hacen llamar actores. Si alguien ha interpretado con maestría un personaje dificil haciendolo de carne y hueso en el cine español ese es Bardem.
Por último, y aunque no coincido con otras personas que han visto la película, creo que el único "pero" que se le puede poner a esta obra maestra es la interpretación de Belén Rueda. Me ha parecido adecuada, solo adecuada, con caracter general, pero he echado de menos que pusiera toda la carne en el asador como han hecho el resto de actores. Que le diese más fuerza a su personaje, una interpretación con más garra, más visceral y más profunda. Pienso que no era la actriz idonea para ese papel aunque ha superado con margen lo que yo personalmente esperaba de ella.

El mensaje de Amenabar es claro, su película no transmite muerte, transmite amor por la vida, pasión por la vida y el placer de vivirla. Del mismo modo reivindica la vida como un derecho, no como una obligación y la libre disposición de cada uno sobre ella siendo como es nuestro bien más preciado.

En definitiva la mejor película española que he visto y, en general, la mejor de este género que he visto en toda mi vida. Una película para recordar.