Pseudo-adolescentes (o esos malditos niñatos)

Buenas a todos. ¿Conoceis la discoteca Woody? Imagino que la respuesta de la mayoría será que si. Para los que estén fuera de Valencia o no hayan salido de casa en los ultimos diez años deciros que se trata de una sala de dos pisos, bastante grande, y donde predomina (o predominaba) la musica house y algún temita tribal de bastante calidad. El sitio en si no tiene nada de malo aparte del robo a mano armada de los tipos de la entrada y la plaga de erasmus babosiles que en el fondo son inofensivos. Pero tiene una particularidad que lo ha hecho muy popular entre los adolescentes: abre los fines de semana, por las tardes, para que la turba de criajos imberbes pueda jugar a "me voy de fiesta" mientras buscan la carne magra de ambos sexos y se divierten un rato haciendo el epiléptico al ritmo de la música. Por mi podrían ir siempre que quisieran, pasarse días allí, como si se les cae el edificio encima. Me trae sin cuidado. Lo que no soporto es que estos mamelucos no son capaces de entender que una vez sales de allí la fiesta no sigue, repito, no sigue en el autobus público. Tampoco son capaces de entender que las barras que recorren el bus no son para auparse a pulso para impresionar a las niñitas, ni que aunque sea posible, no está bien visto utilizar los asientos de pizarra, los televisores como sacos de boxeo y mucho menos tocarle las pelotas a todo el personal que va tranquilamente camino de casa. Reconozco que los hay inofensivos,chavalines y chavalinas que suben entre bromas y cachondeo, arman un poco de escandalo (todos hemos hecho el bestia cuando saliamos con los amigos) y se bajan en su parada sin más problemas que alguna guasa con el conductor. Pero hay otros que desconocen el límite, que es la educación y el respeto a los demás, que nos permite vivir en sociedad y estos malditos niñatos no lo conocen bien porque sus (digamos...) "padres" tampoco sabén lo que es comportarse o bien por que se han pasado por el arco del triunfo el deber de educar a sus hijos. De este modo, esos descerebrados corren arriba y abajo, gritan como animales o se encaran sin miramientos con chofer, pasajeros y cualquiera que se le hinchen las narices y les tire la bronca, del todo justificada. Este panorama le hace arder la sangre a cualquiera, a mi me saca el instinto homicida a flor de piel.
Viendo lo que hacen los becerros esos te sorprendes, yo me sorprendo, de que las "mitja-figas" de sus amiguitas, de una exquisitez semejante a la de sus caballeros, con una falta absoluta de juicio, pierden el culo por ellos y se arrastran cuales babosas. Algo grotesco ver como un maromo de esos chulea a la niña y ella le pide perdón entre sollozos -"es que yo te quiero a ti, el "charli" ("juanca", "miguelo"...) ya no me gusta, te quiero a ti"- Una cubo para echar la pota por favor... Esa imagen me recordó mucho a las de los testimonios de malos tratos en televisión, mismas expresiónes, mismo tono, mismas pintas, mismos chulo-chuleada. ¿coincidencia?
Sea como fuere veo en ellos a los "mascaos" del futuro (pastilleros, descerebrados, amantes del extasis, el tunning, el fascismo, la música techno y todo lo que esté relacionado con pegar a alguien) y me pregunto ¿si no será mejor que se vayan a jugar a futbol, al cine, a tomarse algo por ahí o a pasar un rato con los amigos charrando en el parque, en la plaza...? y si ¿es posible que haya gente por ahi que tenga hijos así en su casa teniendo conciencia de como hablan y a que dedican su tiempo y luego se sorprendan realmente de que sean cocainomanos, alcoholicos o unos simples fracasados? Que si. Que lo se. Que todos hemos tenido 16 años. Que todos hemos sido adolescentes sin cerebro. Que nos hemos comportados como imbeciles en algún momento. Todos hemos hecho el cabra. Si, pero no era igual, mantuvimos un límite, ellos no, teniamos unos valores, un "algo" que no se muy bien explicar y que nos daba un criterio y un juicio de lo que está bien o mal que estos proyectos de persona no llegan a rozar. O las cosas están cambiando a peor o tal vez yo me esté haciendo mayor... ¿las dos cosas?
Quien sabe...